¿Qué encontramos del pensamiento de Sartori en Tijuana?

por Aranxa González y Claudia Sotelo


“La sociedad multiétnica: pluralismo, multiculturalismo y extranjeros” de Giovanni Sartori
es un libro que, aunque publicado hace más de 15 años, mantiene relevancia constante
al realizar criticas de una sociedad que aún tiene los mismos conflictos.


El pensamiento de Sartori


Sartori en su libro titulado “La sociedad multiétnica: pluralismo, multiculturalismo y
extranjeros” explica la realidad de una sociedad abierta en cuanto a la tolerancia que se
tiene ante el inmigrante, siendo una sociedad pluralista y otra multiculturalista. Mientras
este texto pueda ser considerado polémico, ofrece un punto de vista bastante analítico
de las sociedades y la llegada de extranjeros.

Giovanni Sartori expone la realidad en la que vivimos, en el sentido que una sociedad no es
pluralista sólo por ser multiétnica. El proceso de integración de los inmigrantes va más allá
de entregar papeles, también implica que los extranjeros tengan una utilidad dentro de la
sociedad, ya sea a corto mediano o largo plazo.


Sartori en mi mundo

La ciudad pluricultural y la ciudad multicultural

Viviendo en una ciudad fronteriza caracterizada por ser la puerta de entrada y salida de
extranjeros y ciudadanos al país, considero que vivo una sociedad que es muy mencionada
en el libro de Sartori, simplemente a través de experiencia propia. La entrada de
extranjeros muestra una gran diferencia de culturas que existen solamente en mi ciudad.

Aplicando el pensamiento de Sartori a la ciudad de Tijuana, concluí que esta ciudad tiene una sociedad abierta, en donde existe gran flujo de migrantes y mezcla de culturas. Además de ser mayormente pluralista, ya que la gran mayoría de los ciudadanos aceptamos estas culturas y las hacemos lo posible para incluirlas.


Por el otro lado, San Diego también siendo ciudad fronteriza de Estados Unidos con México,
conforma también parte de mi mundo. En esta ciudad también existe gran flujo de
migrantes, sin embargo, al ser una ciudad de un país distinto a México, conforma una
sociedad muy diferente. El pensamiento americano, según Sartori, se cree ser pluralista
pero en cae víctima del multiculturalismo.

Sartori explica como funciona una sociedad pluricultural:

“El pluralismo está obligado a respetar una multiplicidad cultural con la que se encuentra. Pero no está obligado a fabricarla.”


En el caso de Estados Unidos, es evidente la existencia de la multiplicidad cultural, sin

embargo este respeto a veces viene con limitaciones y últimamente ha querido forzar este

respeto, cayendo en la precisa fabricación de la cual se refiere Sartori. Existe una gran

barrera entre culturas, en donde unas se encuentran en mayor ventaja que otras y hay una

variedad exagerada de opiniones que siempre en conflicto constante.




La frontera

En Tijuana existe otro panorama que puede explicar la mentalidad de Sartori, que aunque
se concentra en extranjeros, puede aplicarse a este caso. Tenemos en la ciudad una parte
de la población que vive también pobremente y se encuentra en un cierto conflicto con el
resto de la sociedad: La población de deportados que se queda a residir en la ciudad.


Sin oportunidad de regresar a su lugar de
origen, estos individuos se establecen en
donde tienen posibilidad, normalmente en
asentamientos con condiciones muy pobres
y además se encuentran en una situación
muy difícil para encontrar un trabajo. Ante
estos obstáculos, muchos de ellos se
pierden en las adicciones, lo cual genera
estigma contra todo este sector poblacional.

Aunque de nuevo, no son extranjeros, estas
personas que no son originarias de la zona
son el ejemplo vivo de la importancia de la
integración de quienes son miembros
ajenos a una sociedad.


¿Y el pensamiento de Sartori es acertado?

Depende. Sartori expone como una sociedad pluralista incluye a todas las culturas para que
estas se comporten de una manera adecuada, mientras que en la sociedad multiculturalista
estas culturas toman su propio rumbo, resultando en conflictos a causa de sus diferencias.

Sin embargo Sartori explica la situación del inmigrante de manera un tanto negativa. Él
expone que cuando un extranjero llega a un país, este presenta un problema, ya que hay
veces en las que su cultura es tan distinta de la del país al que estan ingresando que se
piensa que impondrá su cultura a la sociedad. Esto no es totalmente cierto. Cuando un
extranjero llega a un país desconocido, este trata de acoplarse a la sociedad lo más pronto
posible, porque de no ser así no sería aceptado por ella. El extranjero además presenta una
gran oportunidad para la sociedad de expandir su tolerancia y tomar valores del país de
proveniencia de éste.

Es entonces fundamental que entre la sociedad y los extranjeros exista una relación recíproca,
de la cual ambos logran crecer. Este es otro fundamento expuesto por Sartori más acertado,
pues es finalmente como la sociedad pluralista logrará también ser abierta y efectiva para todos
los individuos que se integran apenas o ya estaban integrados.


Ver también

La paradoja de la tolerancia de Karl Popper
Identidad, multiculturalismo y poder de Charles Taylor

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